lunes, 1 de mayo de 2017

AL PUERTO DE JAYENA POR LA CARRETERA DE LA CABRA. 30/04/2017.


Una mañana de Domingo inusual, ya que salíamos otros que normalmente no acostumbramos a vernos en estos días. Y por el tiempo, que después de unos días de poca lluvia, y del día anterior, que sí dejó algo más de agua, e hizo que bajaran las temperaturas bastante, nos hizo a muchos cambiar el vestuario, que ya era casi de Verano en días anteriores.
Por unos percances domésticos, llegué a mi cita con Arturo diez minutos tarde. 
Y vi que me esperaban Fali, su amigo Juan, Arturo, Tomás, el hijo de Julio Pino, y Fernando.
No esperaba que hubiese tanta gente. Y que fueran todos tan competentes para generar un buen ambiente de deporte, compañerismo, y solidaridad.
Así con estas cosas, salió un día redondo, en el que la única pega fue que no llegamos a tiempo para ver pasar a los primeros de La Mamut.
Pero aparte de esto, que es muy normal, puesto que salían a las nueve de la mañana, todo lo demás fue bien. Sin ni una anécodta mala, un percance negativo, o una avería, o problema malo, de ningún tipo.
Bueno; hubo un despiste que no se ni como pasó, y que le ocurrió a nuestro amigo Fernando. Iba un poco atrás, pero no creo que mucho. No nos dimos cuenta de cuanto tiempo o distancia. 
Nosotros íbamos a llegar a la carretera de la Cabra, por Las Gabias, y Alhendín; para subir el Suspiro del Moro, y tomar la carretera de la Cabra, hasta donde pudiéramos llegar por el horario. 
Fernando se fue por el centro de la capital, Armilla, carretera vieja de la costa, y Padul. Allí, él, y el hijo de Julio; estar algo para ver lo que se pudiera de la prueba. Y despúes, tenían pensado ir a Quéntar.
Lo llamé para ver si podíamos quedar en algún lugar a la vuelta. Pero no lo cogió, y no hablamos hasta que estuvimos cada uno en su casa. Entonces me contó la historia. 
Nosotros tuvimos un encuentro inesperado: 
Cuando coronaba la Cabra, sin saber que iban a ir por estos lares; me encontré a Alex, a Antonio Montoro, y a Castro. 
Venían de hacer el Legionario, e iban a ver algo de carrera en Padul. 
El vídeo tiene su gracia. Lo pongo aquí.
 
Bajamos un tramo bueno con ellos. Pero por llenar agua en una fuente, junto a una pequeña aldea, cortijada, o conjunto de casas, al lado de lo que parece ser la antigua Venta del Fraile; nos separamos los dos grupos.
Ya no nos vimos porque al llegar nosotros a Padul, decidieron la mayoría volver, o seguir ruta hasta Maracena, porque se nos iba a hacer muy tarde. 
Paramos un poco a tomar algo en la Tapería Avilés, que como siempre nos repara y atiende muy bien. Aunque esta vez la tapa de albóndigas que nos puso como primera, no tuvo ninguna fotografía, ya que desapareció tan rápido como la puso, por el hambre que traíamos. 
En cambio sí que nos hicimos una fotografía de grupo, los que quedamos al final de la ruta. Y nos la hizo muy amablemente un camarero del personal de la Tapería. 
Con cosas y gente así, es normal que salga un día redondo. En el que echamos de menos a nuestro amigo Antonio "Colorín", que no se fiaba del tiempo, por lo que no salió en bici.
Y se fue a andar con su mujer, realizando una ruta turística por lugares de Granada preciosos que el mundo envidia, y que vienen a ver como y cuando pueden los turistas, mientras nosotros los tenemos a la mano todos los días.
Con esta historia contada por escrito, más el vídeo, que ya he puesto; sólo me queda poner las imágenes del día. Y decir que lo referente a la prueba de La Mamut lo publicaré proximamente en otro artículo. 
Pongo por aquí las imágenes de la jornada que salió espléndida.  

FIN DE PUBLICACIÓN. ¡HASTA LA PRÓXIMA!. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario