Como principio de esta publicación escogeré dos imágenes de la parada en el Restaurante El Zahor.
La fotografía de grupo no se hizo en el exterior porque no se dijo de parar a hacerla, ya que no se nos ocurrió. Y porque aunque quizás hubiera sido Niguelas el lugar para hacer una buena fotografía; como unos subieron al Mirador, y otros no; no se combinó la situación, la circunstancia, y la posibilidad.
Pero una imagen en el interior, junto a una chimenea, es muy propia para las fechas de Invierno en las que estamos.
No es que esté haciendo mucho frío este año. El clima está de lo más raro. Pero ya ha empezado a bajar la temperatura, y este es el primer día que aquí hiela bien.
Sobre todo, en carretera se pasa frío. Pero se puede salir mejor que otros años, por estas fechas.
Para mi, es mi primera ruta de carretera, ya que no la cojo desde hace unos tres meses. Y encima, he estado parado casi tres semanas por una faringitis.
Pero no me fue mal el día. Comencé corriendo un poco más, ya que llegué tarde por diversas circunstancias. Pero no fue mucho tiempo. Llamé a Yiyo para ver por donde iban. Después de un rato de dar pedales bien, enlacé con el grupo en la carretera de Churriana - Las Gabias.
El grupo, por nombrar a los componentes, estaba compuesto por Antonio, Cobaleda, Yiyo, Marcelo, Jonás, y Rubén.
Esto me sirve a mi, y a mucha gente, para salir del letargo, y forzar un poco la máquina, para ir cogiendo la forma.
Aunque algunos ya han comenzado la temporada de carretera, y están ya preparándose para las carreras de MTB, y las marchas de carretera y montaña; otros están saliendo de el descanso, y comenzando la temporada ahora.
Por ejemplo; uno que ha estado descansando bien, es Rubén. Le costó un poco la ruta, e ir a ritmo. Pero es de los que se pone por delante pronto.
Los demás, estamos más o menos por el mismo estado de forma. Y si no; como nos llevamos muy bien, nos agrupamos al ritmo que más nos conviene.
En la ruta nos encontramos con muchos ciclistas. Y hubo un caso de dos que pusieron un ritmo bueno, al adelantarnos, y nosotros seguirlos.
Pero sólo Yiyo los aguantó bien y llegó casi a Niguelas a su par. Las típicas picaillas entre compañeros de ocio y deporte.
Al llegar a Niguelas, paramos a llenar agua.
Y se dijo de subir al Mirador de Niguelas.
Pero Rubén, Jonás y yo, pasamos de hacerlo.
A mi parecer, aún es pronto para hacer esas burradas. Habrá tiempo de hartarse de subir rampas de las buenas.
Mientras ellos subían, nosotros tres, bajamos a La Alquería de los Lentos; una casa rural, restaurante, que es lugar de parada, cuando coincide que esté abierto. Como no fue así, volvimos a subir, y a esperarlos en el principio de la subida.
Al bajar el grupo de los atrevidos, se dijo de ir a El Zahor.
Estando allí desayunando, llegaron, o se pasaron a saludar Rafa y Javi.
Para mi es una fotografía legendaria. Son dos buenos amigos de hace muchos años, como Marcelo. Nos conocemos los cuatro, desde hace muchos años.
Pero estos dos máquinas, son de otro planeta, y ya, a estas alturas de temporada, empiezan a hacer rutas largas, para ponerse finos.
Venían de Lanjarón, con tan sólo parar a llenar agua. Y nos esperaron un poco, para irnos todos juntos a Maracena.
Ahora se puede ir con ellos, pero dentro de poco; cualquiera dice de andar con ellos. Llegamos a Maracena a las una de la tarde, y no me lo creía.
Volvimos por el mismo sitio que fuimos por la mañana. Excepto Yiyo y Rubén, que se desviaron para Armilla, porque les venía mejor. Se puso un ritmo bueno, pero en algunos momentos, se quedaba gente, y había que bajar un punto.
Pero, en definitiva, muy buen día, buena ruta, muy buena gente, y un buen entrenamiento.
Para finalizar, pongo las imágenes que capturé en este día.
Y me despido hasta la próxima crónica.
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